Soy adicta al café. Soy adicta a mi hija. Soy adicta a la alegría y a los servicios de calidad y cercanos. Por eso, soy adicta a Canguro Verde papillas y café. Recomendable cien por cien para cualquier ser humano, pero si encima eres madre o padre, no te lo puedes perder.

Los cafés se reinventan, y Canguro Verde, en pleno corazón del barrio de Ruzafa (Valencia, ES),  es experto en reinventar con gusto, alegría, buen rollo y calidad.  Lo ha demostrado a lo largo de sus nueve meses de vida, vida que le ha dado Cristina con su gran personalidad y sus ganas de hacer de éste, un mundo mejor. Y, qué mejor que comenzar por las familias.

Los adultos  pueden disfrutar con sus niños de un ambiente inmejorable mientras degustan un café o uno de sus zumos naturales hechos al momento, al tiempo que pueden recibir información de primera mano sobre distintos temas relacionados con la maternidad, la educación, las familias, etc.  Para los niños hay talleres, juegos, pizarras, y sensibilidad, mucha sensibilidad, además de todo lo necesario para que estén cómodos (tronas, sillitas, adaptadores en el baño...). Tal vez, trabajo y familia sean difíciles de conciliar, pero el ocio de calidad está a salvo con lugares como esté.

En Canguro Verde cabemos todos, desde los más pequeños hasta los orgullosos abuelos. Ya sea como padres o como seres humanos, en Canguro Verde encontraremos siempre algo más que una cafetería, mucho más.

Lo mejor es que te pases por allí y lo descubras, organizan eventos muy interesantes continuamente, y su horario es apto para todo tipo de edades. Te enamorarás de su filosofía, y el hecho de salir a tomarte un café se convertirá en algo muy divertido y productivo. Yo de momento ya tengo planes alternativos para disfrutar con mi niña, seguiré de cerca la agenda de eventos de Canguro Verde. Gracias a Cristina por crear un espacio como éste, y a Mi Dulce Magdalena por sus geniales fotos del Vermut Musical.

Fuente imágenes:  facebook.com/canguroverde